Jessica Auza
Lima, Peru
| Ciertamente la vida en la ciudad puede ser cómoda, bastante conveniente de diversas maneras y divertida. Usualmente las personas tienen su familia, amigos, trabajos y centros de estudio allí. Desde luego, también se pueden enfrentar allí muchos desafíos. Ya sea que uno sea consciente de esto o no, se tiene que lidiar con crecientes niveles de contaminación, un ritmo acelerado de vida, problemas de salud, crecientes responsabilidades familiares y laborales, problemas de violencia y seguridad, turbulencia emocional y mucho estrés, por mencionar algunos. He visto suceder todo esto con frecuencia, ya que nací en una ciudad grande y viví en ciudades grandes la mayor parte de mi vida, en Perú y en los Estados Unidos.
Si Ud. está padeciendo en cualquiera de estas áreas, o si disfruta del vivir en la ciudad, pero está deseoso de mejorar su calidad de vida, o si quisiera hacer algo muy sencillo, y a la vez significativo, por usted mismo, por sus seres queridos y al mismo tiempo por el medio ambiente, el AGNIHOTRA puede serle de mucha ayuda. |
 |
| Pocas personas se dan cuenta del tremendo impacto que la contaminación en el aire, agua, suelo, etc. tiene en cada uno de nosotros, sin mencionar en las plantas y en los animales. La contaminación no solamente afecta nuestro cuerpo físico, sino que también ejerce mucha tensión sobre nuestra mente. La contaminación del aire altera el funcionamiento de la energía de vida (conocida como Prana, y a veces referida como Chi, Ki u otros nombres) que pulsa a través de nosotros, y esta alteración es inmediatamente transferida al dominio de nuestra mente. ¿Por qué? Porque la atmósfera afecta el flujo de Prana, y el Prana y la mente funcionan como dos caras de una misma moneda. Esto significa que nuestra mente responde a cualquier cambio que ocurre en la atmósfera. Por lo tanto, siempre que exista contaminación en el aire, existirá presión en nuestra mente, que a su vez pudiera crear, por ejemplo, infelicidad, confusión, desarmonía, dificultad para concentrarse y ser eficiente, incapacidad para comunicarse efectivamente, enfermedades mentales, turbulencia emocional y dolencias. Es decir, la contaminación afecta nuestro cuerpo, nuestros pensamientos, nuestras emociones, la manera en que nos sentimos, la manera en que reaccionamos a cada situación en la vida, las decisiones que tomamos y, desde luego, cómo nuestro cuerpo responde y funciona como consecuencia de ello.
Hoy en día vemos que la violencia se incrementa en todas partes, entre miembros de una familia en sus propios hogares, en escuelas, en centros laborales, hasta las guerras de todo tipo que se pelean a nivel mundial. También estamos siendo testigos del aumento de las enfermedades, desde leves resfríos y alergias hasta enfermedades mentales, cáncer y enfermedades degenerativas. Ciertamente, muchos factores y hábitos pueden influir en nuestro estado general de salud, pero algo que TODOS estamos haciendo es respirar 24 horas al día, y si el aire que respiramos está contaminado, esto definitivamente nos afectará en muchos niveles. De allí la urgente necesidad de hacer algo para purificar el aire que respiramos. Afortunadamente, existe una solución para este problema, y es tan simple que cualquiera puede aprenderla: el AGNIHOTRA. El AGNIHOTRA es la práctica principal de fuego de lo que se conoce como la Terapia Homa. Esta ciencia proviene del conocimiento más antiguo conocido por la humanidad, los Vedas. Este establece que por medio de la realización de técnicas específicas de fuego a horas específicas, es posible eliminar las condiciones tóxicas de la atmósfera. Al estar sintonizado con los biorritmos de salida y puesta de sol, el fuego de Agnihotra se realiza solamente durante aquellos momentos específicos del día. A pesar de que el Agnihotra toma tan solo unos pocos minutos, tiene un muy profundo efecto sanador en toda la Naturaleza y en las personas. ¿Qué puede hacer el Agnihotra por Ud.?
En las ciudades las personas frecuentemente alegan estar muy ocupadas y sus estilos de vida no les permiten encajar ninguna actividad adicional por falta de tiempo. Paradójicamente, tomándose unos pocos minutos al día para realizar el Agnihotra, uno puede incluso ganar tiempo, puesto que los procesos de pensamiento se vuelven más claros, la mente naturalmente se vuelve más disciplinada y uno es capaz de hacer un uso más sabio y eficiente del tiempo. Asimismo, más y más personas están encontrando que el incorporar una práctica como la meditación o el yoga les ha ayudado a equilibrar su ocupada agenda diaria. Ellas también pueden beneficiarse de la práctica del Agnihotra, ya que esta puede crear una atmósfera purificada, que es esencial para obtener los mayores beneficios de sus otras prácticas. Por ejemplo, una persona que realiza pranayamas (ejercicios de respiración) hoy, no puede beneficiarse tanto como lo solía hacer una persona 20 años atrás, porque desde entonces la contaminación se ha incrementado mucho. Sin embargo, la misma persona ciertamente puede obtener los máximos beneficios de su práctica de yoga realizándola en una atmósfera purificada, creada por la realización del Agnihotra. Desde el primer instante en que hice el Agnihotra, experimenté cambios internos que rápida e inesperadamente beneficiaron mi salud en general. Esta fue tan solo una de las razones por las cuales me sentí motivada para continuar practicando y enseñando el Agnihotra y la Terapia Homa. Esta práctica ha transformado, para bien, cada aspecto de mi vida y la de miles de personas alrededor del mundo. El Agnihotra crea una atmósfera sanadora, una especie de refugio sutil en la casa, en el trabajo o dondequiera que se practique. No solo eso, sino que además crea un campo de protección alrededor de la persona que regularmente lo practica, de modo que dondequiera que la persona vaya, él o ella llevará consigo esta protección sanadora. ¡Crea en lo que Ud. experimente! |
|